viernes, 9 de marzo de 2012

Sobre las movilizaciones que los sindicatos convocan contra la reforma laboral



El Movimiento 15M de Lugo mantiene su postura asindical, apartidista y no violenta, que no antisindical ni antipartidista.
Consideramos que los sindicatos los últimos tres años ha sido llevar esta negociación a un punto muerto para dejar la decisión en manos del gobierno de turno y favorecer únicamente a la Patronal.
Es evidente que los sindicatos han perdido su credibilidad, y se han acomodado tanto al sistema que los subvenciona que no han tenido reparo en borrar de un plumazo lo que generaciones anteriores habían conseguido con gran esfuerzo.

Subrayamos nuestra disconformidad con las cúpulas sindicales. No podemos olvidar que estos dirigentes han pactado graves pérdidas de derechos los últimos años. Nos preguntamos cuándo será el momento en el que los sindicatos hagan su trabajo y recuperen la confianza de la ciudadanía por ahora perdida o, como mínimo, en tela de juicio. Su papel en la defensa de los derechos de los trabajadores debe ser crucial, por encima de afiliados o disputas entre ellos. Queremos, como trabajadores, recuperarlos para la lucha en defensa de nuestros intereses y contra los desmanes de la patronal y el gobierno.

Por otro lado, esta reforma laboral, sumada a los recortes sociales a los que nos enfrentamos, son un auténtico golpe contra los derechos laborales y civiles de los ciudadanos.
Por ello y aún estando disconformes con la labor llevada a cabo por los sindicatos convocantes, la reforma laboral ya aprobada exige nuestra respuesta en la calle.
Es preciso unidad entre trabajadores a todos los niveles: unidad sindical, unidad entre movimientos sociales y, en definitiva, imponer a las diferencias o errores pasados la urgencia de una movilización masiva, firme y permanente ante la pérdida de los derechos de la clase trabajadora.
Proponemos apoyar las movilizaciones desde un bloque de conciencia crítica, y para ello animamos a todos los que estén de acuerdo con lo expuesto a tomar la calle con un distintivo amarillo para mostrar nuestra posición. Recalcamos que la importancia del colectivo que convoque cualquier acción es secundaria y que es el fondo lo que nos debe mover a manifestarnos.
Así que no olvides llevar algo amarillo; ya sea una prenda de ropa, una cinta, cartulina, cartel… lo que se te ocurra, que sea vistoso para dejar patente nuestra crítica a las cúpulas sindicales pero nuestro rechazo esta reforma laboral y los continuos recortes que venimos sufriendo.